Estos años salvajes (1956) VOSE

These Wilder Years / Metro-Goldwyn-Mayer (MGM)
Director: Roy Rowland
Estrellas principales: James Cagney, Barbara Stanwyck
Actores de reparto: Walter Pidgeon, Betty Lou Keim, Don Dubbins, Edward Andrews, Basil Ruysdael, Dean Jones
Género: Drama
Metraje: 01:27:05
Nacionalidad:

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Antes de ver este melodrama sentimental de MGM «Estos años salvajes» de 1956, una servidora tenía el presentinmiento de que nada de este film podía salir mal, no me equivocaba yo estaba en lo cierto. La película esta bien pensada y aunque la trama en si es algo trivial, no deja de ser una gran historia con un final maravilloso, si a esto le unimos que sus protagonistas Cagney y Stanwyck brillan y de que manera en su único emparejamiento en la gran pantalla, creo que era dificil errar con mi presentinmiento.

Steve Bradford (Cagney), es un hombre de éxito en los negocios que regresa a su ciudad natal con la esperanza de encontrar a su hijo, fruto de un desliz de juventud veinte años atrás dado en adopción. La búsqueda de Bradford se inicia en el orfanato donde nació el niño, institución encargada de todo el procesó de la adopción, el orfanato está dirigido por Ann Dempster (Stanwyck), una mujer que ha dedicado su vida a asegurar la colocación y el bienestar de los niños a su cargo.

En el transcurso de la entrevista entre Bradford y Dempster, este le solicita información sobre el paradero de su hijo ilegítimo pero la directora se niega a divulgar la información ya que son archivos confidenciales del orfanato. Tras su negativa, Steve contrata al abogado James Rayburn (Walter Pidgeon) para que se proceda a demandar a la agencia de adopción…

Bajo esta premisa la película desprende un ligero prefume a radionovela, y es que paradojas del cine, James Cagney aconstumbrado a papeles duros de pelar aquí se encuentra a si mismo interpretando a un personaje central que desprende el aroma más fuerte del sentimentalismo. A Cagney nos lo presentan como un hombre de acero con dinero y poder, un tipo solitario con una vida vacía que ha tomado la firme decisión de localizar a su hijo ilegítimo para darle posición, afecto y todo el cariño del que no pudo desprenderse veinte años atrás.

Barbara Stanwyck nos entrega una emotiva actuación, sin perder las formas pese a la determinación y terquedad que exhibe Cagney, Barbara le hace ver que los sentimientos y los deseos de su hijo son mucho más fuertes que los suyos propios. Según los cambios de animo de Barbara con su personaje Ann Dempster, fuerte, vulnerable, enamoradiza, en todos ellos irradia confianza en cada palabra que desprende de su boca. Esto es lo que amo del cine clásico, siempre vas descubriendo nuevos matices en las actuaciones de los actores con los que una esta familiarizada, la Stanwyck es un claro ejemplo de ello.

Hay otros actores notables en la película como Walter Pidgeon, que interpreta a James Rayburn, el abogado de Steve Bradford, Betty Lou Keim que tuve el gusto de ver en Como un torrente de 1958, un maravilloso melodrama dirigido por Vincente Minnelli. Betty interpreta a Suzie, una adolescente que vive en el orfanato y se encuentra a sí misma en problemas, el rendimiento de Betty no afecta a la película pues esperaba una de esas actuaciones de adolesceste llena de angustia que al menos yo no vi. Me gustó ver a un joven Dean Jone (Un gato del F.B.I., 1965), en un pequeño papel siendo este su primer trabajo acreditado.

Estos años salvajes de 1956 es una pequeña y placida película, un melodrama donde excasean las punzadas propias del género, que poco tiene que ver con los melodramas de Sirk que tanto juego dierón en la década de los 50. El relato que se muestra en la película tiene mucho corazón, aunque carece de giros inespeardos y su ritmo a veces demasiado lento. A pesar de todo, el film tiene grandes momentos creados por las grandes actuaciones de Stanwyck y Cagney llenas fuerza, seguridad y determinación, sin duda ofecen dos fantásticas actuaciones.