La novia de la suerte (1934) VOSE

Gambling Lady / Warner Bros. Pictures
Director: Archie Mayo
Estrellas del reparto: Barbara Stanwyck, Joel McCrea, Pat O’Brien
Nacionalidad:

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Nacida en el lado equivocado, Lady Lee (Barbara Stanwyck) se alza como una jugadora profesional que trabaja en un casino algo turbio. Pero su reputación goza de una honestidad absoluta, rechazando todos los trapicheos que le han propuesto. Impresionado por esta cualidad, el jóven rico Garry Madison (Joel McCrea) se enamora de Lady Lee y le pide convertirse en su esposa. Familiares y amigos de Madison, asumen que Lady Lee es meramente una cazafortunas. (Cristina)

Para que no allán dudas, Gambling Lady (1934), protagonizada por Barbara Stanwyck nada tiene que ver con The Lady Gambles, Dirección prohibida (1949), también protagonizada por Barbara. Esta última es un drama con tintes negros, una mujer periodista con una adicción al juego que no tiene ninguna conexión con Gambling Lady .

La novia de la suerte esta basada en una historia de Doris Malloy, y fue dirigida por Archie Mayo y  producida por la Warner. Barbara Stanwyck es una jugadora profesional llamada Lady Lee, que está obsesionada por el recuerdo de su padre, un jugador que se suicidó al no poder hacer frente a sus deudas. La vida de Lee se complica, cuando se enamora de un hombre del que debe salir indemne de asuntos turbios como el chantaje y el asesinato.

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La Stanwyck no pensó mucho con el director cuando dio el si a este proyecto, Archie Mayo era un hombre gordo y grosero, propenso a pellizcos en las partes nobles de las actrices, (presumiblemente ella lo agarró del brazo la primera y última vez que intentó pellizcar el suyo). A la Stanwick le gustaba McCrea como pareja de baile, él, a su vez, se quedo maravillado de la profesionalidad desempeñada por la actriz. La Stanwick le dio a McCrea otra lección de profesionalidad, el día que estuvo ausente en el pase de las fotos fijas para el casting, no fue culpa de McCrea.

Nadie del rodaje le dijo nada, en especial el publicista que pensó que poco iban a echar en falta a un actor prestado por la RKO, poco después en el almuerzo la Stanwyck acorraló a McCrea. ¿Dónde diablos te has metido que no estabas en el pase de las fotos fijas?, cuando McCrea se encogió de hombros y le dijo que no lo necesitaban, Stanwyck le dio un latigazo con la lengua. «Cuando estaba en el mundo del Vaudeville, nos cambiábamos de ropa y maquillaje en el tren, no podiamos tomar un baño, vivíamos continuamente con una maleta. Tu has crecido en California, dónde ibas a la playas en tus días libres a montar las olas, eres un chico feliz del sur de California, ahora si no te importa mueve tu culo gordo y pongámonos a trabajar«.

Barbara Stanwyck, 1934, la viva imagen del glamour, me enamora este vestido largo brillante con ajustes de armiño en hombros y bajos.  Edith Head diseñó la mayor parte de los trajes para las películas de Barbara, ella tenía una cintura larga, Edith solucionó el problema atrayendo la atención del espectador por encima, alrededor del pecho y los hombros de la Stanwyck. Utilizaba amplios cinturones trayendo la cintura de Barbara para arropar más arriba. (Cristina)

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